22 de agosto de 1805:  Organización defensiva de la flota combinada en Cádiz

De nuestro corresponsal en la zona Julio Terrón:

Después de la alegría general que ayer día 21 se vivió en la ciudad de Cádiz, al ver aparecer en sus aguas a la flota que partió el 8 de Abril, pues hizo levantar el bloqueo inglés que la ciudad venía soportando, pronto se ha sabido que de los 6 buques que partieron de la ciudad en Abril, solo ha llegado el Argonauta, y que esta escuadra no está en manera alguna en condiciones de medir su fuerza al menos a corto plazo.

Muchos de los familiares de los hombres embarcados en su día en la flota y sobre todo de los del San Rafael y Firme se han interesado por el parte de bajas de la batalla, comprobando con dolor y rabia la triste suerte de sus seres queridos. La opinión pública empieza a enterarse de los pormenores de la batalla y cada uno se va formando su opinión personal y sobre todo de las decisiones del Almirante francés.

La primera diligencia de Villeneuve, ha sido pedir a las autoridades del Departamento suministro de raciones para completar las necesarias para seis meses en toda la escuadra. También ha pedido reemplazo de jarcias, pertrechos, pólvora y municiones consumidas en la campaña atlántica. Pero todo esto supone millones de reales y ni las cajas de la Intendencia, ni los almacenes del arsenal pueden atender. Debemos recordar como la antaño brillante economía del monopolio comercial del puerto de Cádiz con América, ha languidecido en los últimos años por las continuas aportaciones a las pasadas guerras, los bloqueos ingleses, la epidemia de fiebre amarilla y la quiebra de multitud de empresas de seguros, compañías navieras con el consiguiente abandono de comerciantes a otros puertos más seguros.

Por tanto en los círculos de poder de la ciudad, ha causado gran impresión el enorme pedido del francés, y por eso los encargados de la ciudad de custodiar los pertrechos, han mostrado viva resistencia a entregar a extraños los que pueden necesitarse en la ciudad.

Se ha mandado también disponer una fuerza respetable de barcos cañoneros, lanchas, obuseras, lombardas, para contribuir a la defensa de la plaza y de la escuadra. Esta disposición era urgente ya que el bloqueo de Cádiz y su posible ataque debe estar organizándose por el enemigo. Como los buques de nuestra escuadra estaban fondeados fuera de tiro de la plaza, se ha tratado de colocar lo citado anteriormente de forma que pudieran defenderse de los enemigos. Nuevamente aparece en la mente de todos los responsables de la defensa, el recuerdo de las acciones de Nelson en Aboukir y Copenhague y de las fracasadas intentonas contra Cádiz.

Por este asunto, para dar cuenta de la campaña y para pedir instrucciones precisas de conducta ante lo que se avecina, se ha trasladado a la corte el general Gravina a entrevistarse con el Príncipe de la Paz. Vamos a ver que noticias nos trae de Madrid.

Editorial

La economía española está agotada y con supremo esfuerzo nos hemos sometido a la voluntad del Emperador francés armando de marzo a septiembre 29 navíos, 11 de ellos en Cádiz.

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