Es sabido por todos, que la celebración de grandes eventos son una gran oportunidad de dinamización, actualización y promoción para la ciudad que los organiza. La conmemoración oficial en Cádiz y San Fernando del Bicentenario de la Constitución de 1810-1812 es un claro ejemplo de ello. Lógicamente los organismos y agentes de todos los sectores de la ciudad están organizando actos institucionales que realcen este acontecimiento, como congresos, conferencias, encuentros culturales y deportivos o espectáculos para que la ciudad capte la excepcionalidad del momento.
Es sentir general en la ciudadanía que esta celebración no debe ser un fin en sí misma, sino que se deben crear cosas que perduren más allá de esas fechas. Éste es también nuestro criterio, ya que pensamos que estos años deben ser un camino a recorrer por los ciudadanos hacia nuevas oportunidades de todo tipo que den más futuro a la Bahía. Un camino de encuentros, de sinergias, de despertar a nuevas ideas…donde hemos de lograr que se implique el mayor número de personas posible.
Creemos que las conmemoraciones de la Constitución de 1810-1812 son una metáfora ciudadana actual en sí misma y que debemos acercarnos a ella respetando y recreando el espíritu que la creó.
Mirando hacia atrás en el tiempo, entonces igual que ahora, había problemas, como un enemigo común a las puertas de la ciudad (el francés), una profunda crisis económica (pérdida de consignatarias y comercio marítimo), una gran preocupación por el futuro… pero también había oportunidades como las ideas liberales de la revolución francesa llegadas fruto del comercio y de colectivos de comerciantes europeos. La ciudades de Cádiz y San Fernando, pese a sus dificultades, supo mantener dentro de sus muros las tertulias, los encuentros y la vida en la calle. Y muchos ciudadanos colaboraron con lo que tenían, se superaron y aspiraron a un futuro mejor codo con codo. Fernandinos, liberales, afrancesados, religiosos, gente del pueblo… todos arrimaron el hombro y cedieron en sus intereses y argumentos para crear una esperanza plasmada en una idea de libertad.
Los enemigos de entonces se fueron y los que tenemos ahora son entre otros el paro, el desánimo y la apatía, la falta de referentes … Los impulsores de esta propuesta estamos convencidos de que debemos ser capaces de crear acciones entre todos para recuperar la ilusión y el compromiso.
Surge la pregunta ¿Crear cosas participativas, con la gente y para la gente, en la calle, que aprovechen las sinergias y posibilidades de la ciudad? ¿Y alrededor de qué tema de los muchos que se están tratando?
Los participantes y agentes del Foro Marítimo que se creó para aportar ideas ante la conmemoración del Bicentenario lo tuvieron claro: Debía ser alrededor del MAR. El mar, la mar de Alberti, la gran presencia, el gran olvidado y al que sin embargo las ciudades deben tanto. El mar del comercio, de los viajes, de las historias, de los misterios, el mar del descanso y de los sueños.
Fruto de la gran presencia del mar en nuestra historia permanecen en las dos ciudades y en la Bahía multitud de instituciones que avalarán con su participación el éxito de la iniciativa: La Escuela Náutica, la Autoridad Portuaria, la Zona Franca, la Asociación de Transitarios, el Instituto Hidrográfico, el Observatorio de Marina, la Federación Andaluza de Vela, Salvamento Marítimo, Astilleros, numerosos clubes y escuelas de vela… todos han sido sondeados y se muestran favorables al desarrollo de esta iniciativa y a su participación.
¿Y en que sede se harían esas actividades? Unas lógicamente en el mar y otras en la calle, en libertad.
Las ciudades de Cádiz y San Fernando con sus rincones, casas, plazas históricas son en sí museos al aire libre, exposiciones andantes, donde las obras, imágenes, películas, eventos, y recreaciones pueden y deben salir a la calle para crear ilusión en el máximo número de personas. Sobre todo esto habla este proyecto: De propuestas de actividades alrededor de lo marino y de las memorias de nuestras ciudades plasmadas en sus calles y en sus aguas; de su música y de la que nos llegó; de nuestra singular cultura.
Serán actividades abiertas, animadas y monitorizadas, pensadas para que calen en la ciudadanía, y provoquen su participación. Actividades que ayuden a florecer la creatividad de base de las gentes, colectivos, asociaciones de vecinos, colegios y comerciantes de la ciudad.
Actividades en fin realizadas en un escenario abierto, integradas y relacionadas en un todo, donde todos ganen, inspiradas en el antiguo eslogan -ya corregido- del despotismo ilustrado : «Todo para el pueblo, pero con el pueblo.»
OBJETIVOS GENERALES
Potenciar la participación de gran cantidad de agentes sociales con el moderno espíritu empresarial del ganar-ganar: Que ganen todos los participantes, los políticos de cualquier partido, las gentes de la ciudad, la ciudad, los comercios, etc.
Tratar de poner en valor la cultura marítima a todos los niveles sociales.
Promover la participación ciudadana de base y vivir la calle desde la cultura y el encuentro en libertad, encuentros de sinergias en otra forma de amar y luchar por la ciudad.
Seguir trabajando en una de las posibles líneas de futuro: Cádiz y San Fernando como ciudades culturales.
Potenciar el comercio de la ciudad, el turismo, las ganas de mejorar.
Aportar actividades para el bicentenario del 2012. Promover la visita a los museos, edificios singulares de las dos ciudades.
Entrevista a Julio Terrón en Onda Cádiz